lunes, 10 de octubre de 2011

Llora Patria Mía



Titulo: Llora Patria Mía.
Por: Giresse Lopez García



Llora patria, llora patria, los nietos de tu revolución se han vendido al mejor postor, celebran con algarabía una supuesta independencia, disfrazan las calles de tricolor, un pretexto más, un día inhábil, uno próximo de resaca, pero y ¿los ideales? ¿Los principios? Ya nadie te recuerda patria mía, han profanado los cementerios sacros de los héroes olvidados, y las luchas revolucionarias han quedado como un simple anecdotario de un triste y olvidado libro de texto censurado, tus hijos dormitan mientras efímeramente pierden sus vidas.

Hoy los festejos no deben ser de sonrisas sino de coraje, el mal gobierno se ha apoderado de tu tierra, la han cubierto de sangre, mientras un discurso imbécil nos dice que es por tu misma seguridad, la libertad es un mito que gana terreno en las viejas generaciones, quienes prefieren prostituir su espíritu por la permanencia de un status quo irrelevante, que sea el sudor de los muchos el privilegio de los pocos, es la falacia que nos dan como doctrina, desde la institución educativa hasta el imperio económico.

Despierten niños míos, grita en sollozo nuestra patria, mientras con los ojos llorosos los ve caer uno a uno, rendidos por la cotidianidad de una rutina impuesta, la expresión esta limitada a un universo irreal, mientras que las calles son silenciadas por las nuevas leyes proclamadas y una institución militar que se ha vuelto una nueva burocracia privada, al servicio de aquel que extiende el mejor pago.

Despierta pueblo mío, te lo pido como hermano, el obrero, el campesino, el estudiante, el empresario, despierta pueblo mío, te lo suplico como hermano, que sea nuestra lucha la dignidad nuestra, tenemos como armas la verdad y la razón, no sucumbas a la tentación de una dulce ignorancia enseñada, manifiesta tu opinión y expulsa tu hartazgo, hagamos estremecer la tierra con la voz de justicia y libertad, recordemos que esto no se trata de utopías sino de sobrevivencia.

Hoy la revolución no es de tiros sino de conciencias, y es el momento de levantarse, las condiciones están dadas, el obrero combate diariamente contra el salario mientras que el campesino lucha de sol a sol por un pedazo de comida, el indígena es una especie denigrada para el estudio de unos, mientras que el hambre lo persigue y la discriminación lo tortura, los estudiantes son solo pequeños corderos dirigidos a un abismo, el empresariado es un peón del corporativismo, el sistema se consume a sí mismo, y tu… tú sigues dormido.

Alza tu voz, grita por tu libertad, que sucumban los poderes ante la manifestación de la voluntad del pueblo, no caigas en su juego, no vivas de rodillas, toma tu último aliento y muere de pie, si somos nietos de una revolución convirtámonos en padres de una nueva.

Hoy no les traigo ni poesía ni literatura sino un desahogo espiritual, de una puta realidad que consume a mi pueblo, hoy les extiendo una invitación, no les ofrezco un final feliz, ni un camino sencillo, tan solo la libertad que se logra en la lucha de la dignidad social, la transformación de un país no se da en las altas esferas, ni en la intervención extranjera, esta nace del seno de la patria por la patria misma, que sea la juventud la que grite, que se haga escuchar su voz y comience la nueva era.

¨SER JOVEN Y NO SER REVOLUCIONARIO, ES UNA CONTRADICCION BIOLOGICA¨

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