Ya ha llegado mi triste final,
Puedo verlo en este abismal,
Me encuentro presa violentamente,
En las manos mísera muerte.
Quisiera poder volver a ver el sol,
Esa luz que me llenaba de alegría,
Pero ahora lo único que veo es el esplendor,
De un tormento lleno de agonía.
Que no vez que me muero,
Que es mucho lo que espero,
Que fuertemente me has de atar,
Con las cadenas de tu amor.
Me conquístate con tu falsedad,
Y ahora ya no sé que es la felicidad,
Solo puedo sentir la fría soledad,
Que me arrastra sin piedad.
Estando en este vacío de incertidumbre,
Siento que me quemo con la lumbre,
Del fuego de tu amor desdicho,
Ya no puedo más lo que he dicho.
Es tan grande la de voz tu egoísmo,
Que no te importa mi sentir,
Solo te importas tu mismo,
Pues no te importa mi morir.
Mas nada puedo hacer para salir,
D e este sufrimiento, de este clamor,
Pasa salir de este mundo de sufrir,
Para superar este desamor.
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