miércoles, 30 de marzo de 2011

Alas


Le tengo envidia a la paloma ordinaria aquella que sin pensarlo,
me presume su par de alas.
Como desearia tener un par igual,
blancas como las del ángel guardián.

Desearía poder extenderlas
y dejar que el viento las acaricie.
Desearía volar al cielo
y buscar su límite. 

Me gusta pensar en cómo sería tocar una nube.
¿Serán como almohadas o algodón?
Me gusta pensar que haya no hace frío,
porque el sol me daría un rose tibio.  

Pero mi sueño acaba en lo más alto,
cuando intento que la ilusion sea real.
Me arrebatan las alas imaginarias,
y caigo a la profundidad.

Y aunque me digan,
que yo no fui hecha para volar.
No pierdo la esperanza,
de que Dios me dé la oportunidad. 

Por Amanda Rubio.

7 comentarios:

  1. Muy hermoso la verdad n,n
    De mis favorios ;D

    ResponderEliminar
  2. Muchas felicidades hija mía...estoy muy orgullosa de tí.

    ResponderEliminar
  3. muchas Felicidades, muy bonito.
    Angelica B.

    ResponderEliminar
  4. Nota: Entre más arriba estes... más frío será, esto puedes comprobarlo por el simple hecho de que las corrientes de convexión existan, el aire caliente sube y al enfriarse vuelve a bajar, así mismo se puede explicar la lluvia, el vapor de agua sube y al llegar "al cielo" se condensa y cae.

    Por cierto, debe de ser maravilloso tener el anhelo de volar.

    ResponderEliminar
  5. Victor Ricardo Lopez Uribe25 de abril de 2011, 16:19

    TwT Tan bello y tan cierto TwT

    ResponderEliminar
  6. me gustó mucho, tengo una fijación con las alas y los ángeles, sólo un comentario.
    en "Me gusta pensar que haya no hace frío" no es haya (del verbo haber), es allá (indicador de lugar)

    ResponderEliminar
  7. Hermoso! me encanta la profundidad de estas palabras.

    ResponderEliminar